El Inusual Primer Avión de Viasa ¿Qué es un Convair 880?
Updated: Sep 28, 2022
El primer avión de Viasa fue un aparato un tanto inusual que hoy en día ha quedado en el olvido. A pesar de que su lugar en la flota de Viasa es un tema discutido con frecuencia por entusiastas e historiadores de aviación en Venezuela y el mundo, para el resto de las personas - sobretodo los de generaciones más recientes, como a la que pertenezco - la existencia de este avión es un tanto desconocida. El aparato en cuestión es el Convair CV-880M.

El Convair CV-880 fue uno de los tres aviones estadounidenses que protagonizaron el principio de la era del jet, pero a diferencia de sus rivales de Douglas y Boeing el CV-880 fue considerado un fracaso y solo se fabricaron 65 unidades. A su derivativo, el CV-990, le fue aún peor con solo 37 unidades producidas. Luego de haber sido un fabricante prominente durante la era de los aviones de propulsión a hélice, a Convair no le fue bien en la era del jet con su estrategia de priorizar la velocidad en lugar del alcance y la eficiencia. Luego del programa CV-880/990 Convair no desarrolló más aviones civiles.
Pero, ¿cómo terminó este peculiar avión en la flota de Viasa?
Para responder a esta pregunta necesitamos dar un leve repaso de lo que se movía en la aviación civil venezolana hacia los años cincuenta.
Viasa se crea como una aerolínea exclusiva para cubrir rutas internacionales desde y hacia Venezuela en buena parte por la necesidad de crear una entidad que asumiese las tareas de la división internacional de la aerolínea del gobierno en ese entonces: Aeropostal, la cual estaba sufriendo debido a dos hechos particulares:
Primero, fuerzas mayores se interpusieron en los planes vanguardistas que Aeropostal tenía para convertirse en la primera aerolínea venezolana en contar con aviones jet. Aeropostal había sido uno de los primeros clientes del turborreactor británico de Havilland Comet. Lamentablemente, el Comet pagó el precio de ser el primer turborreactor comercial en entrar en servicio con una serie de accidentes fatales. Estos accidentes se debieron a vulnerabilidades estructurales, hasta entonces desconocidas, asociadas con el vuelo presurizado a las nuevas alturas que los motores a reacción permitían alcanzar. A raíz de estos accidentes el Comet fue sacado de servicio en todo el mundo mientras se sometía a un exhaustivo estudio y rediseño. Así que Aeropostal perdió la oportunidad de adquirir su turborreactor como lo tenía planeado.
En segundo lugar, alrededor de la misma época Aeropostal sufrió una serie accidentes fatales que resultó en la perdida de tres aviones de la familia Lockheed Constellation en un periodo de dos años. Esto afectó su reputación y puso en evidencia falencias operacionales.
Reacio a simplemente ceder el mercado internacional a la compañía privada Avensa, el gobierno venezolano aplicó una de “si no puedes con el enemigo, únete a él.” De ahí la decisión de crear Viasa, una nueva compañía donde se invitaba a Avensa a ser socia. De esta manera se aprovecharía la experticia de esta, sin entregarle el mercado internacional por completo.
Avensa por su parte había empezado a adquirir varios aviones de hélice Convair CV-340 y 440 durante la primera mitad de los años cincuenta, así que no sorprende el hecho de que cuando llegó la era del jet Avensa se fue con el Convair CV-880. Esto no fue solo por ser el fabricante con el que ya tenía una buena relación establecida, pero también porque era un avión adecuado para los pocos destinos internacionales que la compañía estaba autorizada a explotar en la época, de los cuales el más alejado de Venezuela era Nueva Orleans.

Avensa entonces ordenó un CV-880 en 1959 para luego añadir un segundo avión a la orden en febrero de 1960. Pero con la decisión de crear Viasa, la orden fue traspasada a esta nueva aerolínea antes de que estos aparatos fueran entregados a Avensa. Eventualmente un tercer avión entraría en la flota para formar al trio YV-C-VIA, YV-C-VIB y YV-C-VIC.

Hay que resaltar que Viasa, sin embargo, empezó operaciones el dos de abril de 1961 utilizando un DC-8-33 arrendado a KLM, el PH-DCG "Gugliemo Marconi." Y no fue sino hasta la entrega del CV-880 YV-C-VIA en agosto de 1961 que Viasa contó con su primer avión propio registrado en Venezuela. Los vuelos a Europa siguieron siendo operados de la mano de KLM con sus DC-8 incluso cuando los CV-880s ya habían entrado a la flota, ya que estos no contaban con el rango para cruzar el Atlántico.