YV-823C, El Super 27
Updated: Sep 28, 2022
Durante las décadas de los ochenta y los noventa el Boeing 727 se convirtió el avión insignia de Avensa, y consiguientemente de su subsidiaria Servivensa. Todo comenzó en 1979 cuando Boeing ofreció a Avensa un par de estos aviones nuevos de fábrica originalmente destinados a Syrian Arab Airways, que se convertirían en el YV-74C y el YV-75C. Veintidós años más tarde el YV-823C, un Boeing 727-2D3 Adv. que había recibido la conversión a Super 27, discretamente dejó de ser visto en los aeropuertos que frecuentaba para así poner fin a la era del 727 en Avensa. Sin embargo, el proceso de modificación del YV-823C a Super 27 representó un triunfo digno de celebración para Avensa, a pesar de que tuvo lugar en una época más bien asociada con el declive de esta gran aerolínea.

En este escrito los invito a echar un vistazo a la historia operacional del YV-823C y como este avión, a pesar de estar asociado con los últimos años de Avensa, a su vez representó el principio de un segundo aire que el Boeing 727 tuvo en Venezuela, al que se puede catalogar como la "época Super 27." También los invito a ver parte del proceso de creación de una réplica a escala 1:400 que hice de este avión, para rendir homenaje al importante lugar que ocupa en la historia reciente de la aviación civil venezolana.

Juventud en Jordania
Este avión hizo su primer vuelo el 18 de diciembre de 1980 y poco después fue entregado como JY-AFU a la aerolínea Alia Rojal Jordanian, cuyo nombre cambió poco después a simplemente Royal Jordanian. Su designación oficial fue 727-2D3 Adv., que quiere decir que era un 727-200 Advanced configurado conforme a las especificaciones del cliente “D3,” que fue el código que Boeing le asignó a Royal Jordanian. Fue el 727 número 1701 en salir de la planta de Renton cerca de Seattle, y fue fabricado hacia el final del periodo de producción del 727, el cual terminó en septiembre de 1984 con 1832 unidades producidas. Ya para cuando fue construido, todos los 727-200 que estaban saliendo de la fábrica eran de la versión advanced, que ofrecía una serie de mejoras sobre la versión -200 original.
En abril de 1989 Avensa compró el avión, pero interesantemente se lo alquiló inmediatamente de vuelta a la misma Royal Jordanian antes de llevarlo a Venezuela en 1996. Este fue uno de cuatro 727-2D3s que Avensa compró a Royal Jordanian.
Bienvenido a Venezuela
Este avión llega a Venezuela en una época en la que la aviación comercial del país se enfrentaba a duras realidades. La Línea Aeropostal Venezolana (LAV) estaba quebrada y no operaba desde 1994. El final de Viasa estaba a la vuelta de la esquina, y Avensa estaba agresivamente traspasando sus operaciones a su subsidiara de bajo costo, Servivensa. Dado ese contexto, el avión llega directamente a formar parte de la flota de Servivensa y recibe la matrícula venezolana YV-823C.
Durante sus primeros años en Venezuela el avión fue visto operando con una librea parcial de Servivensa. Esta librea consistía de un fuselaje blanco con solo los títulos de la aerolínea y el logo de la cola, como se puede ver en la imagen a continuación.

De 727 a Super 27
A pesar del ambiente poco optimista que rodeaba a la aviación civil venezolana en esos años, aun se veían de vez en cuando dejos de los tiempos mejores; no tan distantes en ese entonces. Un ejemplo de esto fue la iniciativa que tomó Avensa para convertir al YV-823C en un Super 27, proyecto que se llevó a cabo en los talleres de Maiquetía durante buena parte de 1998.